Tuneros y moteros

son dos grupos totalmente diferente lo único que les une es el amor por el mundo del motor. Que celebran carreras ilegales en sus concentraciones.

Tuneros: invierten mucho dinero en su coche, complementándolo con faldones, embellecedores, equipos de música, tapicerías, neones, etc.; todo con el fin de llamar la atención.
Lo que mas valoran son el equipo de música, que tiene que ser el mejor entre todos los demás.
Hay muchos tallares que se dedican al tunning, y son muy visitados por ellos.
Estos suelen ser de estética bakala, con pocos recursos económicos, pero con préstamos de padres o bancos.
Su música: Los tuneros prefieren a Camela y el recopilatorio de Radical.
Celebran concentraciones por toda España con el afán de mostrar sus coches.
Suelen consumir alcohol, cocaína y pastillas.

Moteros: ya no son adolescentes, que no se preocupan por llegar a fin de mes y se permiten comprar sus motos con su dinero y gastarse altas sumas de dinero en cascos personalizados, monos de cuero, flecos, espejos y serigrafías.
Dentro de estos están:
racing (conducen motos deportivas)
harlystas (conductores de Harley Davidson)
winger (fanáticos de las motos Goldwing).
Todos ellos buscan sentirse libres.
No tienen preferencias musicales, pero los harlystas prefieren el metal, rock y country.
Suelen hacer rutas gastronomitas y turísticas, también suelen reunirse en concentraciones de motos.
Las drogas que toman son hachís y cerveza.