Con pasado marginal, violento, drogadicto y delictivo, esta tribu ha dejado atrás las historias del Vaquilla y el Torete, héroes de la época, para pasar contar historias picantes, con juerga y divertidas.
Dejando atrás los enfrentamientos entre payos y gitanos esta tribu se muestran tolerantes en casi todo, menos con las mujeres, con las cuales tiene ciertos tabúes.
Muchos de ellos presumen de su llamada cultura de los suburbios pero poco tienen de cultura, sobre todo al oírles hablar.
Su estética actual bordea el estilo bakala con su pelo de punta, aunque todavía quedan con pelo largo, pendientes y anillos, pantalones vaqueros, sudaderas y jerséis juveniles Rottweiler, No Fear o Central Rock.
Sus ropas no cuestan un excesivo dinero, a diferencia con otras tribus, pero con sus collares, pendientes y anillos los cueles los tienen como un símbolo de respeto y admiración se ven obligados a pagar grandes sumas de dinero por ellos, logrando llegar al consumo general de todas las tribus.
Los lolailos no dudan en mezclarse con otras tribus y cometer el adulterio musical, ya que en su mayoría son grupos de jóvenes que viven en la periferia de las grandes ciudades y
no han renunciado a sus raíces culturales andaluzas.
Su música: Los Chichos, Los Chungitos, Camaron, Estopa, Andy y Lucas, Las Grecas, Los Manolos, Ketama, Camela, Javi Cantero, El Barrio y muchos más los cuales mezclan sonidos y estilos de ayer y hoy.
Sitios frecuentados: Los Gabrieles, Cardamomo, Callejón de Madrid, al Candelatodos ellos situados en Madrid y muchas más tabernas y bares repartidos por toda la geografía. No frecuentan festivales pero se les puede ver algunos en sitios bakalas.
Drogas: En sus inicios todas las existentes, actualmente cocaína, y los más jóvenes marihuana y hachís, por normal.
lunes, 23 de febrero de 2009
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Hola a todos los putos de aqui
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